Algo más acerca de los esmaltes y sus componentes

En este apartado trataremos de ahondar un poco en el tema del esmaltado y los procesos que lo rodean como son las calcinas, un proceso tan importante y que a veces no damos la importancia que lleva. Es conveniente ,  sobre todo cuando vamos a realizar complejas técnicas en las que vayamos a utilizar óxidos en estado puro o caolín, zinc u algún otro mineral,  calcinarlas para evitar sorpresas desagradables,  como pueden ser las burbujas desprendidas por la liberación del oxígeno contenido en ellos. Aquí les muestro este proceso,  que no es complejo y nos será de gran ayuda en el control de nuestros materiales,  haciéndolos mas estables.



El proceso para realizar calcinas,  o sea para calcinar los producto es el sgte:

Tomar el recipiente (puede ser un cacharro cualquiera) y pintar sus paredes interiores con una solución de caolín con alúmina (óxido de aluminio) con el fin de cuidar que no se pegue en el interior.

Si los materiales están en estado palpable, o sea, en forma de que puedan ser mezclados en seco, proceder a mezclarlos con un mortero.

Introducirlos en el cacharro y proceder a la calcinación, según la temperatura que corresponda.

Cuando esta se realice tomar la calcina y proceder a lavarla con vinagre (ácido acético) a fin de extraer las sales,  esto se comprobará a través de un papel tornasol.

Después el tamizado garantizará una mayor estabilidad en el color.